
Quien es José de Guimarães?
José de Guimarães, el artista que adoptó como seudónimo el nombre de la ciudad que lo vio nacer (su nombre completo es José Maria Fernandes Marques), se convirtió en uno de los principales artistas visuales portugueses, cuya carrera se expandió más allá de las fronteras de una manera verdaderamente admirable –en otros palabras , José de Guimarães Es uno de los pocos artistas portugueses cuya carrera internacional es más importante que la nacional. Su vocación artística surgió en 1967, cuando entró a trabajar como ingeniero militar. Los primeros pasos en el mundo de las artes estuvieron inspirados en las manifestaciones artísticas de la cultura africana y el Pop Art. Otras influencias van desde el estilo barroco de Rubens, al abstraccionismo de Klee y Kandinsky. Pintor, escultor, coleccionista y antropólogo aficionado creó su propio estilo, ya sea con el alfabeto creado o con las obras que representan la gran fascinación de José de Guimarães por culturas no occidentales -entre ellas Angola, México y Japón- y por las creaciones del Hombre. Durante varias décadas, José de Guimarães ha cruzado las relaciones no verbales en sus obras. En cada figura, símbolo, textura y color, hay características muy singulares que crean una lectura creativa de su arte y de las civilizaciones africana, china y mesoamericana. Descubre cinco fantásticas obras que explican la carrera de José de Guimarães.
5 OBRAS DE ARTE
Inspirado en las aventuras de los navegantes portugueses y en la vida del poeta Luís de Camões, José de Guimarães Creó 16 litografías. Cada uno cuenta una historia o representa una figura indispensable en la historia de Portugal, desde el primer rey de Portugal, D.Afonso Henriques, hasta la historia de amor de D.Inês.
Dibujos De Arena
Esta serie refleja la influencia del arte africano, principalmente de la cultura de los Quiocos del Noreste de Angola en las obras del artista portugués. Estas obras aparecen en su imaginario a través de la influencia de dibujos dibujados en el suelo durante las conversaciones, ideogramas sintéticos de esquemas mentales y simbólicos.
Hong Kong
En esta serie de Hong Kong se nota la influencia de la estética y la caligrafía china. El propio artista dijo: «Mi primer contacto con Japón se debió a una relación mera profesional, y casi al mismo tiempo fui contactado por el Goethe Institut de Osaka para construir cometas (...) mi interés por la cultura asiática, concretamente la japonesa y china, comenzó cuando comencé mis primeros contactos con Oriente en 1988. A partir de ese momento comencé a introducir elementos y arquetipos de estas culturas en mi propia obra (...) Comencé a interesarme por la poesía china de las dinastías Tang y Song y de Hokusai (especialmente su arte erótico), con importante importancia en las series de Hong Kong»
Nuno Faria escribió en el catálogo de la exposición "Negreiros e Guaranis - José de Guimarães"sobre las obras de Negreiros: “A partir de la extraordinaria colección de arte africano primitivo del autor, sin duda una de las más relevantes del panorama portugués, lo que proponemos es reactivar estos nexos, estas conexiones, una forma radical de alteridad que se establece en la relación entre el espectador y las obras en diálogo”. (…) Con esta operación de desplazamiento aparentemente simple, se establece una conexión entre lo negativo y lo positivo, la forma y su vacío, que abre un espacio para la materialización de la ausencia a través de la presencia y viceversa, posibilitando la representación interna en ausencia o en el negativo, el principio de alteridad. (…) Esta geometría del encuentro, en equilibrio precario, propone una metáfora, un transporte semántico: distancia y proximidad son nociones abstractas y culturales que somos capaces de transponer o deconstruir a través del ejercicio empírico del contacto con las cosas, la experiencia del mundo . Es este movimiento de aproximación, este tanteo, a veces sin distancia, sin la mediación de la visión, lo que constituye el modus operandi de José de Guimarães, su ética de intervención”.
Alfabeto africano, 1970-1974
Entre 1970 y 1974 se produjo el período angoleño en el que se adquirió una nueva lengua, influida por el pensamiento ideográfico, propio de la cultura tribal africana. La serie Alfabeto Africano se presenta como “el aprendizaje de una lengua basada en una riqueza cosmogónica, una reinvención permanente del mito fundacional y no cosificada ni mediada por la palabra (...) Del aprendizaje del arte africano, en su forma primitiva, ritualista e iniciática, el artista tomó lo que es el vocabulario, base de toda su obra, cuya gramática, operando a través de la articulación de fragmentos recurrentes en posibilidades combinatorias, remite a un lenguaje ideográfico propio de una cultura oral. cultura matricial que opera a través de la transmisión y el intercambio directo, objetual y metafórico. Los ideogramas, el uso del símbolo, la forma clara, normalmente traducida en negativo mediante el uso de la silueta, se han convertido, más que en una forma importante de reconocimiento, en la posibilidad de superar una visión dialéctica y retórica del mundo”.