
Los hijos gemelos de Narges Mohammadi recibieron el Premio Nobel de la Paz en Oslo, Noruega, en nombre de su madre, encarcelada en Teherán desde 2021 por sus posiciones a favor de los derechos de las mujeres en Irán.
Kiana Rahmani, la hija de 17 años, no ha visto a su madre en siete años y teme no volver a verla nunca más.
"Tal vez la vea dentro de 30 o 40 años, pero no creo que la vuelva a ver nunca más". La hija de Narges Mohammadi afirma, sin embargo, que no volver a verla "no importa" porque su madre "vivirá siempre en el corazón de Kiana" así como los "valores por los que vale la pena luchar".
El Premio Nobel de la Paz fue entregado ayer en la capital noruega. Debido a la ausencia forzosa de la laureada, la representaron sus dos hijos gemelos, Kiana y Ali.
Narges Mohammadi, de 51 años, es una reconocida activista por los derechos de las mujeres en Irán y la democracia iraní. Una de las principales luchas del nuevo laureado es contra la pena de muerte, todavía vigente en la República Islámica de Irán. Los hijos de Narges viven exiliados, en París, con su padre, Taghi.
En este domingo simbólico, el activista inició una nueva huelga de hambre.
En una conferencia de prensa celebrada el sábado en Oslo, el marido de Mohammadi, Taghi Rahmani, sus hijos y su hermano dijeron que el nuevo ataque tenía como objetivo mostrar solidaridad con la minoría religiosa bahá'í en Irán. El Islam, donde el chiísmo es la religión estatal, considera a los bahá'ís 'Son herejes y espías vinculados a Israel.
Fuente: Euronews