En la Bienal de Venecia de este año, representantes de Brasil arrojarán luz sobre los pueblos indígenas de su territorio, que alguna vez estuvieron al borde de la extinción por el dominio colonial y que ahora luchan por recuperar lo que les fue arrebatado.
La misión comienza con el nombre del sitio de exposición, que pasó de Pabellón de Brasil a Pabellón Hãhãwpuá, una referencia a la palabra que el pueblo Pataxó designaba al territorio antes de que fuera colonizado por los portugueses. La artista y activista Glicéria Tupinambá fue elegida para hacerse cargo, pero su obra no es la única que estará expuesta. También tienen previstas contribuciones los artistas Olinda Tupinambá y Ziel Karapotó.
Para Denilson Baniwa, Arissana Pataxó y Gustavo Caboco Wapichana –los tres curadores del Pabellón Hãhãwpuá– un enfoque comunitario fue fundamental para el mensaje.
“La exposición reúne a la Comunidad Tupinambá y artistas de pueblos costeros –los primeros en transformarse en extranjeros en su propio Hãhãw (territorio ancestral)- para expresar una perspectiva diferente sobre el vasto territorio donde habitan más de 300 pueblos indígenas (Hãhãwpuá)” , dijeron los fideicomisarios en una declaración escrita conjunta.
Para ellos, el Pabellón Hãhãwpuá “cuenta una historia de resistencia indígena en Brasil, de la fuerza del cuerpo presente para retomar el territorio y adaptarse a las emergencias climáticas”.
“Ka'a Pûera: somos pájaros caminantes” es el nombre de la exposición prevista para el pabellón y también dice mucho sobre cómo piensan los comisarios sobre su proyecto en Venecia. La frase clave, Ka'a Pûera, es un acrónimo que sugiere alusiones duales: primero, a un tipo de tierra agrícola que, una vez cosechada, produce una ola de vegetación baja; y segundo, a un pequeño pájaro que se camufla hábilmente en densos bosques.
Ambas imágenes reflejan a los Tupinambá, considerados extintos hasta 2002, cuando finalmente fueron reconocidos por el Estado brasileño. En este sentido, los Tupinambá son al mismo tiempo aves y tierras de cultivo que resurgen: casi borrados pero nunca desaparecidos, poderosos en su capacidad de mezclarse, más poderosos cuando exigen no hacerlo.
Fuente: Noticias Artnet