Hoy se inaugura en el Museo Serralves de Oporto una exposición que reúne una selección de nuevas obras del fotógrafo António Júlio Duarte, la mayoría de las cuales fueron creadas durante la pandemia.
La exposición se titula "Febre" y fue diseñada específicamente para la Sala Contemporánea del museo, presentando 50 fotografías de idénticos formatos, y, en la Capilla de la Casa de Serralves, una impresión en tela de gran formato de la obra "Queimado" (2017).
La exposición, con concepto de António Júlio Duarte y Paula Fernandes, forma parte del programa Proyectos Contemporáneos, desarrollado con el objetivo de mostrar nuevos artistas y formas de arte, según la entidad.
Durante la pandemia, incapaz de viajar como la gran mayoría de la población, António Júlio Duarte capturó imágenes que muestran "una secuencia rítmica y convulsiva de escenas banales de la vida cotidiana sin narrativa ni conexión aparente", describe un texto del museo sobre la nueva exposición.
Las obras fueron realizadas entre 2019 y 2022, y en ellas el artista intercambia el territorio elegido -las calles de las ciudades de los países que visita- por las habitaciones de la casa donde vive o por el exterior, inmediatamente cercano y visible.
De este período quedó "un registro casi diarístico e íntimo de su práctica" que se exhibe por primera vez, marcando también la primera exposición, en este museo, del fotógrafo nacido en Lisboa, en 1965.
António Júlio Duarte estudió fotografía en AR.CO (Center for Art & Visual Communication), en la capital, y fue becado por la Fundación Calouste Gulbenkian en el Royal College of Art (1991), en Londres, Reino Unido.
En cuanto a la instalación de la mampara, "se aprovecha el espacio íntimo de la Capilla y la duplicidad que constituye la transparencia del tejido", añade el comunicado.
La producción artística de António Júlio Duarte ganó consistencia y profundidad a partir de la década de 1990, década en la que inició una gira por el mundo, creando una gran cantidad de imágenes, inicialmente en blanco y negro, y luego en color.
"Su cámara nos hace tomar conciencia de fragmentos de realidades, tanto lejanas como cercanas: la fotografía tiene un carácter universal, reconocible, y no conoce fronteras [...] adquiere una dimensión antropológica y su autor se destaca y permanece en el centro del imagen", afirma también el texto, calificando la obra de António Júlio Duarte como "sutil pero también nítida y asertiva", en imágenes de "una profundidad primordial y primitiva".
La exposición "Febre" podrá verse hasta el 12 de noviembre en la galería contemporánea del museo y en la capilla de la Casa de Serralves, en Oporto.